Adolf Hitler

Adolf Hitler

Nació en Braunau, Austria, el 20 de abril de 1889. Su padre era un aduanero austriaco, Alois Hitler. Cuando éste murió, el joven pudo dedicarse a sus aficiones artísticas. Se fue a Viena, en 1905, pero no pudo ingresar en la escuela de Bellas Artes, por lo que en esa ciudad terminó llevando una vida bohemia. Fue en este periodo cuando se empezaron a forjar sus ideas políticas. En 1912 se fue a vivir a Munich, donde frecuentó grupos antisemitas. Dos años más tarde se alistó en el ejército bávaro, para combatir en la Primera Guerra Mundial, donde sufrió daños en los ojos provocados por los gases. Por estos daños, se le condecoró con la cruz de hierro.

Vuelto a Munich permaneció en el ejército hasta 1920, como "oficial político", en el cual se encargaba de vigilar las actividades de los comunistas. Así entró en contacto con un grupúsculo de ex combatientes y desclasados, el Partido Obrero Alemán fundado por Dexler, del que se convirtió en el séptimo miembro.

En 1921 eliminó a Drexler convirtiéndose en presidente y cambiándole el nombre al partido por el de "Partido nacionaloscialista alemán del trabajo". Comenzó unas buenas relaciones con los sindicatos. También en ese año creó las milicias del partido, las SA, dirigidas por Rohm, y en 1923 se convirtió en líder de las formaciones de extrema derecha.

Hitler intentó imitar el golpe de estado de Mussolini el 8 de noviembre de 1923, pero no le salió bien, y al día siguiente el gobierno bávaro mandó disparar sobre él. Hitler fue herido y también condenado a pasar cinco años en prisión en 1924, aunque no pasó más de cinco meses. Allí escribió un libro en el que plasmó todas sus ideas: "Mein Kampf" (Mi lucha).

Cuando salió de la cárcel su partido había sido desmantelado. Las tendencias socialistas de los Strasser se enfrentaban al antibolchevismo de Rosenberg y el activismo violento de Rohm. Hitler creó las S.S. para contrarrestar a las S.A. de las que desconfiaba. El partido nazi aumentó mucho sus diputados gracias al poder de oratoria que tenía Hitler para exponer sus ideas, ganándose así la confianza del subproletariado, de numerosos desocupados y de los burgueses que estaban descontentos. El nuevo canciller, Von Papen, que representaba a la derecha, concedió a Hitler la disolución del parlamento y autorizó las S.S. y las S.A.

El 30 de enero de 1933, Hitler sí ganó las elecciones, logrando entrar en el gobierno con Bruswick; además ya había recibido la nacionalidad alemana (1932). Ahora como canciller, tenía el poder del país por un período de cuatro años; por lo que utilizó este tiempo para reorganizar Alemania y hacer más fuerte su dominio.

Durante la noche del 30 de junio de 1934 (conocida como "noche de los cuchillos largos"), Hitler eliminó a los jefes de las S. A. y de sus adversarios políticos. Así obtuvo la presidencia del Reich y la cancillería, con el nombre de "Führer", en agosto de ese mismo año.