lunes, 11 de abril de 2011

Alexandrine Trinne


En la mítica búsqueda de las fuentes del Nilo, pocos saben que entre los intrépidos exploradores del siglo XIX se encontraba una mujer. Se trata de Alexandrine Petronella Francina Tinne, nacida en La Haya el 18 de octubre de 1835. Su padre fallece cuando Alexandrine tenía 10 años corvirtiéndose probablemente en la más rica heredera de los Países Bajos. Recibió una esmerada educación, impartida no sólo en La Haya, sino también en Londres y Paris. El carácter liberal de su familia la impulsó a viajar a Egipto a la edad de 19 años. A sus 22 años Alexine toma la decisión de explorar las míticas fuentes del Nilo. Las provisiones comienzan a escasear y Harriet, la madre de Alexine, regresa en el vapor a Jartum en busca de alimentos frescos. Harriet consiguió sus alimentos en Jartum y los llevó en el vapor a Jabal, donde la esperaba el resto de la expedición. Las damas holandesas llegan a Gondokoro con su vapor, lo que produce gran excitación entre los nativos al atracar en el muelle. Aunque éstos les informan de que es imposible avanzar, Alexine decide seguir adelante río arriba hasta Juba donde se convence de la oportunidad de retirarse. Esta decepción provoca que Alexine caiga enferma y la expedición se detiene durante todo un mes. Aprovechan para interrogar a los nativos por las fuentes del Nilo, quienes se ríen contestándoles que no existen. El estado precario de la salud de Alexine les devuelve a Jartum un mes más tarde, donde se muestran orgullosas de haber sido las mujeres europeas que más habían avanzado en la búsqueda de las míticas fuentes del Nilo.
Picada por la curiosidad, Alexine decide explorar ahora el interior de África navegando en su vapor hasta Bahr al-Ghazal, el mayor afluente occidental del Nilo, y después viajando por tierra hasta el Lago Chad. Alexine esperaba descubrir también las fuentes de río Congo. 
En Europa las expediciones y hallazgos de Aline empiezan a ser conocidos y admirados, y los periódicos le adjudican epítetos como “joven y bella”, “amazona sin miedo”, “cumplidora indefectible de sus objetivos”, “conocedora de muchas lenguas, entre ellas el árabe”. Además Alexine tuvo tiempo e interés en diseñar una bicicleta adecuada para que la mujer victoriana pudiera guardar su modestia. 
Era precisamente el Sáhara el próximo reto que Alexine tenía en mente. Así pues en 1869 determinó convertirse en la primera mujer occidental en atravesarlo. A tal fin, contrató a dos marinos holandeses para que se unieran a la expedición. La primera fase de la expedición de Alexine resultó según se había previsto.Desgraciadamente corrió el rumor entre los camelleros de que los tanques estaban llenos de monedas de oro. Cuando estaban abandonando el oasis de Wadi Shergui, 12 jinetes entraron en el campamento diciéndoles que los enviaba el jefe Ichnunchen para conducirlos hasta Ghat. Desaparece el guía tuareg de la expedición y se produce un altercado entre los 12 jinetes y los criados árabes de Alexine. Un marinero holandés trata de restablecer la calma y un tuareg lo atraviesa con su lanza, dirigiéndose a continuación hacia donde estaba Alexine, quien para detenerlos levanta la mano. Un tuareg saca su espada y le corta la mano. A continuación se produce el caos, el otro marinero holandés y los sirvientes árabes tratan de defender a Alexine, y son asesinados por los tuaregs quienes abandonan el campamento dejando que Alexine se desangre hasta su muerte, con 34 años. 

2 comentarios:

  1. Se me había olvidado comentaros que, puesto que tenéis un apartado únicamente a mujeres, podríais incluir estas entradas en ese apartado. Sólo es una sugerencia.

    ResponderEliminar
  2. Si si, hemos incluido todas las publicaciones de mujeres en el apartado de anecdotas y biografias de mujeres =)

    ResponderEliminar